martes, 17 de junio de 2014

CRÓNICA IBERMAN LA LUZ


Bien dice el lema del logo de este Ironman, “El límite lo pones tú”...y así fue para mi en esta ocasión si no quería acabar en una ambulancia. 
Espíritu FINISHER siempre, pero al hospital nunca, y yo sé donde están mis límites tras caer fulminado en Elche 2008 y rozarlo en otras tantas ocasiones.

Este año la economía no está para muchos alardes y elegí este Ironman por la zona que me gusta mucho, cercanía, trazado en bici que, aunque duro, me encanta que haya de todo, y la fecha que, siendo en Junio, me venía muy bien como primera toma de contacto con esta distancia, para después recuperar y seguir teniendo verano para rato. Los entrenamientos estaban siendo muy buenos y mi cuerpo asimilaba todo lo que le echaba, hasta el punto de ir con plena confianza a encarar esta prueba.

Parecía que la logística del triatlón con dos boxes y meta en lugares diferentes iba a ser más complicada pero lo cierto es que no me disgustó.
Conforme a los recorridos, la natación fue en una playa que daba gusto nadar, la bici con un desnivel muy considerable sumando cada subida, sin puertos, pero sabes a lo que vas y que para mi gusto es algo que disfruto, y una carrera a pie que si la cuadriculas en la cabeza se puede transformar en bastante amena quitando un poco los tramos de soledad.
Al margen del día infernal que se presentó, en lo demás debo ser sincero y a la vez crítico porque son detalles que determinan una carrera: avituallamientos para mi un poco separados, demasiado diría yo con el calor que hizo, y además sin bebidas refrigeradas dejándolas "al tiempo" además de faltar alimento sólido muy necesario en la carrera a pie aparte de lo que tu llevas.
Por lo demás, un Ironman en el que me sentí "En casa", a gusto y tranquilo.

Con un viaje relativamente corto y, con la gran compañía y ayuda en todo por parte de mi pupilo 
David López Petersen, me planto en Monte Gordo (Portugal) el viernes a primera hora de la tarde para descansar un poco y dejar hecho todos los preparativos del día siguiente.
Las previsiones del tiempo auguraban un día muy duro y mi planteamiento para esto era de ser extremadamente conservador, e incluso asimilar que me iba incluso a parar en cada avituallamiento para tratar de que no faltara de nada ya que a veces podía pasar una hora entre uno y otro y esto me ponía un poco nervioso.
La carrera en sí fue el infierno que cabía esperar, y los avituallamientos para un día “normal” quizás se hubieran llevado bien, pero demasiada lejanía unos de otros para soportar temperaturas de más de 40º sin poder refrigerarse en tanto tiempo.

La Natación con el mar en casi calma la disfruto al máximo, aprieto un poquito al principio, no quería acompañantes... y nado tranquilo, sin prisa pero sin pausa, fijándome en máxima economía con buena tracción y frecuencia baja, en soledad, recreándome con mis buenas sensaciones, el coger las olas que se formaban cerca de la orilla, escuchar los ánimos al salir para el paso de la primera vuelta o al correr directo a boxes por el tramo de playa.

La Bicicleta es dura, no hay apenas puertos, quizás uno de 2km pero lo que si hay son infinitos toboganes, bajadas que se hacen rápidas y subidas que se hacen lentas... Pero bueno, nada comparado con algunas rutas de mis entrenamientos muchísimo más duros y que controlé a la perfección.
Salgo trankilo, dejando hacer y cojo ritmo de "entreno" pero eso si, muy continuo con muy buenas sensaciones, sin tener que buscarlas. Las subidas ligero de cadencia y sin aplicar más potencia de la debida, bajadas muy concentrado en las trazadas y buscando los desarrollos continuamente cambiantes para encarar los toboganes con la mejor inercia posible.
La premisa: no hay necesidad de respirar “por la boca”...ni en las subidas.
Un ritmo constante más que adecuado para controlar la distancia por detrás y creer que aseguraba la batalla al calor que preveía.
Las primeras horas comida y bebida con el protocolo adecuado, asimilando bien y los kilómetros que pasaban disfrutando de algunos bonitos paisajes Portugueses.

Las dos primeras horas el calor es normal, se lleva bien, pero poco a poco vas notando como hacia el interior y, conforme aprieta el sol, la cosa se va poniendo fea.
El bidón ya no es caliente, es un hervidero... En cada avituallamiento regalo más de un minuto echando pie a tierra: botellín de agua por encima, dos bidones, otro botellín para salir bebido y otro para ponerlo en el trasero metido en la malla del mono estilo “Faris Al Sultan”, pero en cuestión de 10-15´todo arde de nuevo. Llevo pastillas de sales (mucho mejor que bebida de sales hirviendo!!) y parece que al beber voy hidratando pero empiezo a no asimilar ese agua caliente, el alimento no entra bien... Trato de dejar reposar el estómago a ver si asienta pero claro, esto te va vaciando...

Casi me entra más el sólido que los geles pero temperaturas de 45 grados y beber caliente hacen que el cuerpo empiece a luchar por refrigerar. Echarme agua que quema apenas arregla nada, mi cabeza parece que va estallar, no puedo respirar hondo y parece como si tuviera asma. Curiosamente el pedaleo me gusta, me encantan las sensaciones que llevo, pero el cuerpo no responde y decido empezar a pedalear suave a partir del km130 más o menos. No veía claro correr en esas condiciones y rezaba para que yendo suave se quitara tan grande malestar pero para nada, el golpe de calor ya había hecho mella y solo siento angustia constante.

Por detrás van lejísimos y pienso que los demás lo deben estar pasando mal igualmente.
Pienso en compañeros que están en carrera, en gente que para colmo está tardando más que yo en ir de un avituallamiento a otro, gente que aún está horas más que yo sobre la bici en ese infierno!!

Aprieto los dientes y llego a boxes para soltar la bici muy mareado casi cayéndome de ella al bajarme.

Me tiro al suelo sin pensarlo, trato de calmarme porque respiro acelerado aún sin moverme, esto es un golpe de calor en toda regla...
Me cantan que por detrás van a unos 15´ y más atrás lejísimos...increíble...y apenas pude hacer esfuerzo ninguno en 30-40km...
Debo salir a correr como sea. Me calzo las zapatillas en el suelo, me echo agua, trato de respirar hondo y salgo a encarar un maratón en un estado que me daba muchas dudas pero lo que estaba claro es que jamás hay que perder la esperanza.

Corro dejando hacer, el cuerpo no va bien, pero estoy entrenado y las sensaciones de carrera son buenas y poniendo un pie tras el otro voy avanzando. Pasan los minutos y noto vacío, he metido poco alimento en bici, lo sé, pero no podía hacer otra cosa... Abro un gel desesperado porque empezaba a marearme pensando que queda poco para el siguiente avituallamiento, supuestamente al km3 y pico...pero pasan los minutos y no llega... Tengo sed... Por fin al km 5,5!! Casi no llego...me paro en seco como un oasis y bebo y me echo agua... Más minutos perdidos pero ya me da igual, sólo trato de ver como sobrevivir a esto. El agua y demás está “del tiempo”, no se me ocurre beber isotónico ni por asomo, trato de seguir con mis pastillas de sales y agua que ya tampoco empieza a sentar bien ni asimilar. Paro a orinar...otro minuto...pero otra excusa para tratar de calmar el cuerpo que al más mínimo sobreesfuerzo me hacía angustiar aún más sin poder respirar y atacando a un ya sensible estómago embotado de agua imposible de asimilar. Hambre sin poder comer, sed sin poder beber...

Miro hacia atrás y aún no veo a nadie! Trata de mantenerte firme Iván, pasito a pasito...pero sin andar...
Tomo geles hirviendo pero ya no entran con la angustia que llevo y el calor, los veo y me dan arcadas, me apetece sólido, plátano, barrita... Y no hay!! En ningún avituallamiento!! Yo no contaba con esto y el muro se hace más grande...

Empiezo a vaciarme del todo, me echo a andar para evitar el mareo y que la angustia se acreciente. David me anima,a tope pero ya solo quiero sobrevivir... Al km 20 me pilla el Portugués Delaunay, al Km22 me tumbo en un césped a la sombra echándome agua por lo menos para refrigerarme viéndo como me pasa, tras mucho rato, el otro portugués Oliveira.

David no para de animarme y recordarme las personas que estáis ahí detrás... pero estaba pasando de nuevo por lo mismo que otras muchas veces y ya no encuentro sentido a esto.
Parece que me encuentro mejor y me levanto, al fin y al cabo sigo tercero!!! Ando y troto y al siguiente avituallamiento parece que la organización trajo plátanos y barritas pero ya apenas puedo ir metiendo bocadito a bocadito...voy en tal déficit que necesitaría asimilar un plato de macarrones...y ya es impensable...

Me recupero algo y troto otros 4km hasta que sucumbo vacío y malo pensando que esto es una locura degradándome vivo y jugándome el tipo.
Me tiro a un banco por el Km26, a tranquilizarme...a tratar de pensar que era lo mejor por mucho que doliese esta decisión y eso que el cuarto clasificado ni aparecía...pero no veo forma de continuar 16km más sin poner en juego mi salud y la temporada que aún me queda por delante.

Dar mi más SINCERA ENHORABUENA a todos los que cruzaron esa meta, una de las más dificiles que he podido presenciar, y a los que no lo hicieron pero lucharon con lo que tuvieron, todos y cada uno de ellos, para mi son auténticos héroes.

Sin lamentaciones...me da igual...aquí estamos para disfrutar y no para llorar, seguimos adelante y unas carreras saldrán bien y otras no, cuenta el cúmulo de todo porque en general vivimos lo que nos gusta y debemos sentirnos más que orgullosos y sobre todo felices, PASE LO QUE PASE.

He disfrutado mucho entrenando, algo súper importante también, eso que llevo encima y se que hice las cosas muy bien para este IM, apliqué unas premisas básicas que me han encantado para disfrutar en este viaje de preparación y superé entrenos con creces y control que fueron un pasito más allá de lo que hice otras veces, ellos fueron pequeños triunfos que me alegraban el camino.

Me quedo con este párrafo de una gran crónica de esta carrera en el blog de Waltrapa: (http://waltrapanumberone.blogspot.com.es/2014/06/iberman-2014-pedaleando-con-el-diablo.html) : 

"Mucha gente se retiró por golpes de calor, deshidratación, etc... en esa situación, yo no quiero terminar nunca más un Ironman. Este deporte es mi vida pero si me la va a quitar.....hasta aquí hemos llegado"

A levantarse...SIEMPRE!!